sábado, 25 de julio de 2009

Viva Galiza Ceive!

Miñas donas e meus señores:
Si no abrente d-este día poidéramos voar sobor da nosa terra e percorrela en todas direicións, asistiríamos á maravilla d-unha mañán única. Dende as planuras de Lugo, inzadas de bidueiros, até as rías de Pontevedra, oureladas de piñeraes; dende as serras nutricias do Miño o a gorxa montañosa do Sil, até a ponte de Ourense, onde se peitean as augas d-entrambos ríos; ou dende os cabos da costa brava da Cruña, onde o mar tece encaixes de Camariñas, até o curuto do monte de Santa Tegra, que vence coa súa sombra os montes de Portugal, por todas partes xurde unha alborada de groria.
O día de festa comenza en Sant-Iago. A torre do reló tanxe o seu grave sino de bronce para anunciar un novo día, e de seguida comeza unha muiñeira de campás, repinicada nas torres do Obradoiro, que se comunica a todol-os campanarios da cibdade. (...)

Hoxe as campás de Compostela anuncian unha festa étnica, filla, tal vez, d-un culto panteista, anterior ao cristianismo, que ten por altar a terra nai, alzada simbólicamente no Pico Sagro; por cobertura o fanal inmenso do universo; e por lámpara votiva, o sol ardente de xullo, o sol que madura o pan e o viño eucarísticos. Por eso a muiñeira de campás, iniciada en Compostela, vai rolando por toda Galiza, de val en val e de coto en coto, dende os campanarios pimpantes da veiramar até as homildes espadañas da montaña. E o badaleo rítmico das campás -de todal-as campás de Galiza en leda algarabía- semella o troupeleo dos cabalos astrales, que veñen pol-a vouta celeste, turrando co carro de Apolo, que trai luz e calor ao mundo en sombras. Hoxe é o Día de Galiza, e así comenza.

Así dá comenzo a solemnidade d-este día; a Festa maor de Galiza, a Festa de todol-os galegos. Pero ninguén pode sentila, coma nós, os emigrados, porque en tal día coma este revivien as lembranzas acuguladas, e coa moita destancia agrándase o prodixio da patria. Hoxe a nosa imaxinación anda por alá, en festa de saudades, escoitando as cántigas montañesas e mariñeiras que van para Compostela, vendo o noso país embandeirado de azul e branco, con músicas, gaitas, pandeiros, aturuxos e foguetes... E dispóis de evocar o repique matutino das campás -mal ou ben, ao xeito de Otero Pedrayo-, eu podía evocar igoalmente, todol-os lances xubilosos d-este día, hora a hora, minuto a minuto. Pero ¡cómo se tornan tristes as alegrías evocadas lonxe da patria! ¡Cómo doen as ledicias arrincadas do recordo da nosa mocedade! E cómo para min é certo o que dixo o mellor poeta da nosa estirpe:
Sen tí perpétuamente estou pasando
Nas maores alegrías, maor tristeza


Alfonso Daniel Rodríguez Castelao Alba de Groria


Viva Galiza Ceive!!!


viernes, 24 de julio de 2009

costa rica é así...

Hoxe vou facer unha entrada especial...

Es una recopilación de cosas que me hacen mucha gracia en este país, pero bueno... mejor lo veis por vosotr@s mism@s...

El top ten de las ticadas:

En el número 10:

La compañía nacional de fuerza y luz, que no se les ocurre otra cosa que poner el símbolo de la okupación como logo!


En el número 9:
Pequeños problemillas con la escritura y la pronunciación:


Esta es bastante buena, pero os juro que la semana pasada Braulio y yo vimos un cartel en una soda (además en un tamaño bastante considerable) que ponía:
CERBISIOS
Y vosotr@s os preguntaréis: pero esto qué é lo que é???
Pues ni más ni menos que los servicios. Anda que... mira que lo complicaron bien. Qué sólo acertaron en las vocales!! Pena que no teníamos la cámara a mano. En este país no merece la pena ni guardarla en la funda, porque siempre hay algo que fotografiar.

En el número 8:
A ver quién es la/el chulit@ que se atreve a irse sin pagar:


Con la dirección y todo, por si hay alguien más a quien le debe dinero, para que se organicen y se vayan a su casa a romperle las piernas. Pa' que aprenda.


En el número 7:
Sin palabras. Aceite capullo.
Y Pozuelo: es muuuuuuuuuuucha galleta. Por ahí ya no se ven eslóganes como estos. La publicidad ya no es lo que era.


En el número 6:
Los Casio varatos (varatos, varatos), pero que me decís de los Nikís, eh??


En el número 5:
Recordáis que en alguna entrada os hablé de la fisionomía de las ticas? Que tienen bastante pecho?
Pues ahí tenéis la prueba, hasta los maniquíes se adaptan a la realidad...


En el número 4:
Si el maniquí de antes os impactó no os vayáis a pensar que con los hombres se quedan atrás, que no sea por tallas, que aquí hay hombres muy hombres... (aunque yo siempre que paso por la tienda el calzoncillo en cuestión sigue ahí, que me parece que eso no lo venderán en mucho tiempo...) Que son unos fanfarrones!!!!!



Y llegamos al podio:

En el número 3:
Ambiente familiar. Esto estaba escrito en la carta de un restaurante mexicano en San José. Pero un restaurante normal y corriente, no os vayáis a pensar...


Transcribo porque no se ve nada, pero en serio, es lo que pone:
Importante: usted está en un ambiente familiar y no se permite escenas románticas (sean solteros o casados). Si usted falta a esta disposición no será atendido. Le agradecemos respetar el reglamento.

Queda dicho.


En el número 2:
Las imitaciones...

Eso, mor amor, y menos guerras!

Pero los action man no eran unos muñecos???

Addict... casi cuela...

Y una de las mejores...
Hogo Boss!!!

Están curradas, eh??


Y la campeona de campeonas, mi preferida:

La gomina moco de gorila!!! Y sus variantes: la baba de lagarto y la de rinoceronte.

Es que además es verde de verdad, el color de moco está muy logrado!!

Total, no??
muxu bat!


domingo, 12 de julio de 2009

Panamá!

Cruzando case a fronteira dos 8 meses (case un embarazo!) tocoume (tocounos) cruzar a fronteira outra vez pra renovar o visado. E esta vez decidimos ir a Panamá, pra coñecer o outro país veciño, xa que non creo que teña moitas máis oportunidades de facelo.
E este país sorprendeunos moi gratamente, tanto ó Braulio coma min.


Gustounos a comida (sen culantro!), a xente (que en xeral teñen moita máis cara de indi@s, de indixenas), a paisaxe...
E sobre todo os prezos, moito máis barata que Costa Rica...

Pero también hubo un montón de cosas que nos sorprendieron, porque sigue siendo un país centroamericano y hay cosas que nunca entenderé...


Bueno, Panamá es un país relativamente grande, es decir, no se puede conocer en una semana y entre viajes y desplazamientos se peirde mucho tiempo, porque aunque existen mejores carreteras que en Costa Rica, los viajes son horribles, larguísimos y pesados, ya que los buses tienen las mismas características en los tres países que visité: Costa Rica, Nicaragua y Panamá.
Así que, al final nos decidimos por entrar por Paso Canoas (la fronteras más occidental) y volver por Sixaola (Caribe). Descartamos la posibilidad de ir a Ciudad de Panamá, aunque nos apetecía bastante conocer Colón y el canal, pero llegar a Ciudad de Panamá nos suponía 20 horas de bus, y no nos apeteció mucho. Así que nos decidimos por visitar Bocas del Toro, que son un conjunto de islas en el Caribe muy bonitas, donde se pueden hacer un montón de cosas.


Pero bueno, como siempre, intentaré empezar por el principio, que si no se me embarullan las ideas.
Salimos de Cuestillas y lo de siempre: Cuestillas-Ciudad Quesada-San José. En la capital ya nos dejamos de taxis, porque ya empezamos a conocerla y más o menos nos ubicamos, así que, plano en mano nos fuimos a la estación de buses muy confiadas. Demasiado. Al llegar, (porque sí que llegamos al lugar que buscábamos), nos dijeron que allí ya no era la parada de los transportes panameños y que la habían trasladado a donde cristo perdió la zapatilla. Así que al final tuvimos que agarrar un taxi.

Cogimos un bus que nos dejó en la frontera y cuando llegamos ya era de noche y para más alegría estaba lloviendo. Porque el viaje desde San José a Paso Canoas (la frontera) nos llevó como unas 7
horas. Cuando llegamos casi no había gente, ni barullo... porque eran cerca de las 10 de la noche pero preferimos hacer el papeleo del pasaporte para quedarnos más tanquil@s. Nos fuimos al puesto fronterizo de Panamá y nos dijeron que para entrar al país teníamos que mostrar un billete de salida (ya fuera de bus, de avión o lo que sea) nosécuanto dinero y solvencia de noséqué. Vamos, que era una liada tremenda. Así que ahí fue cuando saqué a relucir mis dotes parlanchinas y cameladoras: que si éramos voluntari@s en Costa Rica, que teníamos muchas ganas de conocer su país porque ya nos íbamos, que qué dura es la vida y qué caro todo, que éramos galleg@s y eso está mu lejos...
Total, que al final (y claro, hablando de fútbol también, que con eso te los conquistas a todos) nos dijo el chico que iba a intentar solucionarnos lo de la entrada al país, porque quería ayudarnos y para que viésemos que en Panamá hay muy buena gente.
Así que nos fuimos otra vez al lado de Costa Rica, a que los maderos nos sellasen la salida y volvimos a junto nuestro amigo. Bueno, pues al volver dijo:
- venga, traedme esos pasaportes. Que conste que esto no lo podría hacer, pero bueno, me caéis bien... blablabla...

Y cuando ya nos lo había hecho y nosotr@s le estábamos dando millones de gracias, el hombre, con una enorme sonrisa en la boca y muy digno él, nos dijo que como lo había hecho que le podíamos dar (a él y a su amigo) lo que quisiéramos, la voluntad.
Vamos, que nos estaba sobornando.
Pero bueno, a cambio de 10 $ conseguimos entrar en Panamá.


La primera noche la pasamos allí, en un hostal pequeñito pero muy cómodo, con baño privado y tele, que para mi es un lujo, porque no tenemos televisión en la casa y cada vez que la veo me meo de risa.
Hay programas del tipo: La reina del reggaeton, que es como un operación triunfo muy, muy ,muy cutre (pero muy cutre) que consiste en que cada semana o cada día, no sé, van unas muchachas a bailar 3 o 4 canciones diferentes de regaeeton (a cada cual más hortera, más patética y más hiriente para las mujeres) y un jurado más patético todavía las pone a parir.

Los informativos también son la ostia. Empezando por que no hacen más que sacar robos, accidentes, asesinatos y detenciones al más puro estilo de Policías Polis. Los informativos son como una mezcla entre gente (el mítico programa de sucesos) e impacto total.
Y todo esto sin hablar de l@s presentador@s. Las mujeres, de tan maquilladas que van y los escotes que les ponen parecen drag queens y los hombres más o menos... El que está ahora tiene crestita como beckham y cada día lleva camisas más brillantes y menos discretas. La primera vez que miré un informativo fui incapaz de atender a nada de lo que estaban diciendo porque con las pintas que llevaban me tenían totalmente despistada...
Y como os podréis imaginar, el prime time está totalmente acaparado por culebrones y todas las familias entán engachadas a ellos.

Vamos, que la tele no debe de tener desperdicio. Pero voy a volver a Panamá.

El segundo día nos fuimos a David, que es la tercera ciudad más grande del país después de Panamá y Colón. En realidad en una ciudad horrenda, no hay nada más que tiendas, tiendas y tiendas, pero merece la pena verla. Es increíble el dinero que se gastan en publicidad: carteles de más de 5 metros, gente repartiendo flyers, coches con megafonía a todo trapo... Y en muchísimas tiendas (y esto también lo hacen mucho en Costa Rica) ponen en la entrada unos bafles enormes, tamaño pachá, con música a todo volumen, como una manera de llamar la atención, aunque en mí provocan el efecto contrario. Y muchas veces, tienen un dj en una mesa fuera del establecimiento que va comentando las jugadas con el sonido a tope:
- qué guapas chicas están pasando por aquí. Anímense, entren y disfruten de nuestras ofertas.
- ahí va la mamá con sus hijas, que ya aprovechó los grandes descuentos de nuestra tienda...


Horrible!!! Eso me recuerda al hombre que se pone en la feria a vender bragas, fajas y calconcillos con el micro agarrao al cuello: que talla usa señora, a 84??? leve estes suxeitadores tamén, que boa falta lle farán.

Bueno, viendo el percal, nos dimos un paseo por la ciudad, comimos rico y barato (5 $ l@s dos) y decidimos irnos al cine, porque no había mucho que hacer por allí. Tuvimos suerte y entre Transformers, Terminator y no sé qué más mierdas, echaban una peli de animación que se llama Up, que bueno, no es de mis preferidas, pero nos pasamos la tarde entretenida, y calmé el mono de cine que tenía, que desde que me vine nunca pude ir al cine, porque aquí no echan más que mierdas yankis, es increíble.

Rúas de David

Las mujeres visten estos trajes que están hechos en las comunidades indígenas

Ah! y se me olvidaba contaros la aventura del hostal...
Bueno, cuando llegamos a David echamos una visual por la ciudad, a ver que encontrábamos y al final le preguntamos a una chica por un hostal barato y céntrico. Y nos dijo que sí, que había uno que se llamaba hotel galicia que estaba muy bien, que nos montáramos en un taxi y que nos llevara. Pues la muy lianta paró a un taxi y pa cuando nos dimos cuenta ya estábamos de camino al galicia... ni palabra nos dejó pronunciar, parecía que se llevaba comisión!!!


Bueno, pues llegamos allí y le dijimos que nos diera la habitación más barata (9$ por l@s dos, con baño privado) y nos pareció muy bien, pero claro, cuando entramos en la habitación... madre mía, que sucia!!! las paredes llenas de chorretones y la taza del baño sucísima de manchas de humedad.
Pero bueno, para una noche... (eso sí, yo me puse el pareo en la almohada y la toalla de sábana, que no me apetecía tocar mucho aquellas telajas...)
Evidentemente el hotel era de un hombre de Ourense y estuvimos charlando un poco con el.

Patacones (plátano frito) con carne

Por cierto, se me olvidaba decir, que, aunque la moneda del país es la balboa, casi nadie la usa, porque lo que se mueven son dólares. Y a veces, pagabas con dólares, pero el cambio te lo daban mezclado, de balboas y dólares, como que tienen el mismo valor. Es un poco locura y no creo que sea muy bueno para el país, pero es una de esas cosas que nunca entenderemos... (y ni siquiera conseguimos ver un billete de balboas, no sabemos ni si existen).

Al día siguiente nos cogimos un bus hacia Almirante, y desde allí una lancha a Bocas del Toro, que es un archipiélgo de 9 islas. El viaje es muy bonito (y barato, los buses no valen casi nada) sobre todo el viaje en lancha. Se ven las casitas sobre el mar, alguna tan destartalada que no te puedes ni imaginar por qué razón sigue en pie.

En Almirante


Y Bocas es un lugar totalmente turístico, muy parecido al Caribe costarricense, pero con el encanto de estar en una isla. La zona más turística se encuentra a las orrilas del mar, pero en cuanto te adentras un poco hacia el interior de la isla conoces un Bocas más auténtico. El estilo de las viviendas es muy caribeño, con balcones de madera muy coloridos, y la población es mayormente negra. Son descendientes de indios mezclados con criollos y la mayor parte de la gente allí habla el "guariguari”, que es una mezcla de afro-antillano, ngobe bugle, español y francés. Y nosotr@s no fuimos capaces de entender nada cuando hablaban en ese idioma.


Cuando llegamos a Bocas nos asaltaron un montón de hombres intentando vendernos tours, llevarnos a hoteles baratos... pero nosotr@s ya sabíamos de unos hostales que nos había recomendado Eduardo, así que nos hicimos l@s dur@s... pero por poco tiempo, porque estos saben lepe y al final un chaval nos convenció para hacer un tour al día siguiente: por 15$ cada una nos llevaban en lancha a bahía delfín a ver delfines, a hacer snorkel a Cayo Coral (que diréis: que carallo é iso?? pues consiste en que te ponen unas gafas de bucear y el tubito para respirar y hala!! a ver peces y corales!) y también nos llevaron al parque nacional de la rana roja, donde también hay playa. Nos pareció muy completo y más o menos barato y nos apuntamos.

E mirade a quen nos atopamos en Bocas... Unión Fenosa!!
Non lles chega con destrozar media Galiza,
eiquí tamén teñen o puto monopolio...


Nos hospedamos en un hostal barato que estaba muy bien, porque además de ser limpio (después del hotel galicia hasta la calle nos parecía limpia) teníamos habitación con baño privado y tele con cable, que al final nos vino bien para mirar alguna peli el último día, que estuve un poco pachuchiña y además no paró de llover hasta la tarde.


Así que al día siguiente nos fuimos de excursión. No hacia sol, pero tampoco llovía y hace bastante calor, así que el tiempo estuvo muy bien. Bahía delfín nos gustó relativamente, porque se pueden ver los delfines bastante cerca, pero si lo piensas es algo cruel, porque suponemos que por allí pasarán un montón de lanchas al día, que se pasan un rato largo persiguiendo a los delfines para que l@s señorit@s turistas (o sea, nosotr@s) podamos ver bien de cerca a los animales.


Después nos llevaron a Cayo Coral, a hacer snorkel!! No sabíamos muy bien lo que sería y el lugar no es muy bonito, porque es como un muelle con un bar, pero cuando te pones las gafas, te metes en el caribe (que siempre está a una temperatura super buena) y ves lo que tienes a tu pies alucinas...


Peces de colores (alguno de los que salen en la peli de Buscando a Nemo! el de la voz de Bruce Willis!), corales, bichos que parecen babosas...
Increíble! es precioso!!

Y después nos fuimos al paque de la rana roja, que se oye un montón, por todas partes, pero que es muy, muy difícil de ver, porque es muy chiquitina. Menos mal que andan un@s nen@s por el sendero con ranitas enseñéndotelas (a cambio de un dolar, claro). El parque no nos gustó mucho, porque se veía un poco sucio y descuidado, pero aún así es interesante.



Y poco más, dimos un paseo por la playa, nos tiramos a dormir la siesta y volvimos a Bocas.
El viaje estuvo bien, aunque nos tocó un guía muy soso, que casi no nos contaba nada, pero bueno, fue muy interesante, sobre todo por el snorkel.


Y esa noche nos fuimos de farra un poco, a probar le ron de Panamá (que no está tan rico como el de Nicaragua) y encontramos un bar horrible, lleno de yankis que estaban haciendo una fiesta de Michael Jackson!! Y no os lo perdais! había gente disfrazada de él!!!
que risas!!! había alguno que teníais que verlo... con la cara embadurnada de betún... ja, ja, ja...
También descubrimos algunos bares bonitos, con música reggae. Vamos que lo pasamos muy bien.


Y al día siguiente teníamos planeado ir a visitar una isla en la que hay una comunidad indígena, pero amaneció un día malísimo, lloviendo mucho y no nos atrevimos a ir (además a mi me dolían mucho los dientes y la cabeza, porque por las noches apreto la boca). Y hasta la tarde no salimos de la habitación, nos pasamos la mañana durmiendo y mirando pelis, pero es que no se veía un alma por la calle de lo que llovía. Fue muy mala suerte, pero bueno, no todo nos iba a salir bien.

Y ya el domingo tocó retirada. Cogimos la lancha hacia Almirante y de allí un bus a Changuinola, ya que desde Changuinola salía un bus directo a San José. Por el Caribe el trayecto es más corto así que a eso de las 8 de la tarde ya estábamos en casa, zapateadas en la cama.

Calle de Changuinola

Paso fronterizo en Sixaola

Y hasta aquí nuestra aventura en Panamá. La próxima será en Nicaragua...
A celebrar el 30 aniversario de la Revolución Sandinista!
que ganas!!!

bueno, pues ya os contaremos.
Un bico enorme...